Cuando
entramos nos dijo una chica que la visita comenzaba a las 5 de la
tarde y terminaba a las 8 de la tarde,
por eso,
mientras fuimos a dar una vuelta por
Huesca para ver como están adornadas las calles. Cuando
llegó la hora de ir al planetario, nos fuimos a toda pastilla ¡ja,
ja! en coche.
¡Era
muy chulo! Después fuimos a un
simulador y nos teníamos que poner unas gafas 3d para
hacer un viaje a Saturno, cuando llegamos a sus anillos
nos chocábamos
contra rocas, bultos de arena... El
viaje fué muy movido y yo gritaba, pero
bueno, otros niños también gritaban no por
ser maleducados sino porque lo estábamos pasando bien.
También
un señor nos explicó como hacer un cohete con material reciclado.
¡El
cohete tocó el techo del planetario y fué impulsado por aire! ¡Era
muy chulo!
A
continuación vimos por dos telescopios nebulosas e incluso planetas
como Saturno, las Pleyades y la Osa Mayor, además dos estrellas que
se están muriendo. Nos
dieron un planisferio celeste que se usa para buscar estrellas y
localizarlas en el cielo con números, por ejemplo: 31...
¿Y
además sabíais que Huesca está en latitud 0, 42º? ¿A
que es chulo saberlo?
Además
nos dieron unas linternas para ver el planisferio mejor en la oscura
noche y nos dijeron que no se usaban para una pelea de rayos láser
¡ja, ja, ja!
Por
último, en la tienda me compré “La Ciencia Del Agua” que es
hacer tornados y pompas de jabón gigantes, un llavero y algo para
merendar.
Esta
es la maqueta del planetario. ¡Adiós!
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