Kika
está en su casa jugando con su hermano y, como le gusta tanto la
magia, se mete en su habitación, recita un hechizo en voz alta y se
va a la selva...
Se
encuentra con un papagayo y con una tribu y se hacen todos amigos.
Entre todos van a buscar un tesoro.
Para
llegar al tesoro hay que pasar por una cascada y una puerta magica
por donde entran. Allí hay barios cocodrilos encerrados en jaulas y
hay un señor que quiere matarlos. Kika lucha contra el señor y
ganan Kika y la tribu. Ella consigue el tesoro pero se lo da a la
tribu que eran los que lo estaban busacando y ella regresa a su mundo
en su habitación.
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